Los productos perecederos son un mercado en crecimiento para la carga aérea, especialmente, en los últimos meses tras la crisis del COVID-19. Cada vez resulta más importante asegurarse de que este tipo de productos de corta vida útil lleguen al destino final intactos.

Desde IATA (Asociación Internacional de Transporte Aéreo) se lanzó en 2019 el CEIV Fresh para mejorar el manejo y el transporte de productos perecederos. Con esta certificación, los transportistas tienen la seguridad de que las empresas están operando con la más alta calidad y estándares en el transporte de este tipo de mercancías.

El programa CEIV Fresh cumple con estos exigentes requisitos, principalmente basados en el Reglamento de carga perecedera (PCR) de la IATA, que combina información profesional de expertos junto a la de las administraciones. El CEIV Fresh sigue al CEIV Pharma que certifica el transporte de envíos sanitarios a temperatura controlada, como ya hablamos aquí. Junto a estos dos también existe el CEIV Live Animals para el transporte de animales vivos. Se trata de tres certificados que cada vez tienen mayor peso en el transporte internacional y que todos los operadores, como es el caso de RFL, valoran en el día a día de sus operaciones.

Excelencia y estandarización

La IATA, que representa a unas 290 aerolíneas que comprenden el 82% del tráfico aéreo mundial, lleva años trabajando por lograr enfoques comunes que ayuden a alinear las necesidades y responsabilidades de todas las partes interesadas involucradas en el manejo de productos perecederos. Sus programas de excelencia para Validadores Independientes (CEIV) trabajan para lograr la certificación y estandarización global en el transporte y manejo de productos de carga especiales en todo el mundo.

Ventajas

Los beneficios de aplicar este tipo de prácticas en la logística de perecederos son:

• Permitir una mayor colaboración entre las partes interesadas y las rutas comerciales certificadas.
• Promover un enfoque uniforme en un entorno multimodal para el transporte de productos perecederos.
• Garantizar la seguridad alimentaria y evitar el desperdicio de alimentos a lo largo de la cadena de suministro.
• Elevar la competencia de los equipos de trabajo a través de programas de capacitación eficientes y sólidos.
• Reforzar la confianza a través de la transparencia y la comunicación.